(pinchar la imagen para ver más grande)
No es la primera vez que pasa, Luis María Ansón ya dejó clara su opinión sobre el cierre de Egin y lo vuelve a recordar una vez conocemos la sentencia de Egunkaria, una vez más este periodista situado en el lado más extremoso de la derecha deja de lado la opinión estandar de su postulado político para dejar claras unas cuantas cosas.
Lo primero, un loable ejercicio de razonamiento y sentido común el suyo, siendo el único de su gremio que criticó el cierre de Egin aplicando una máxima irrefrutable, «Son las personas las que delinquen, no los periódicos», aplicando el mismo razonamiento para Egunkaria, el mismo que hace que hoy celebre al igual que muchos otros el fín del calvario de sus dirigentes.
Lo segundo, y no menos importante, que ha dejado durante todos estos años con el culo al aire a la progresía española, que no dudó en aplaudir los cierres de estos dos periódicos «por si acaso» y con una insultante falta de madurez intelectual se tragaron a la primera las mentiras del Juez del Olmo, al igual que sus columnistas y contertulios, como bien dice Ansón en su artículo «estos progresistas de salón, callados como putas». Ha ganado varios puntos Ansón por su demostración de algo de lo que carece este país, sentido común.
En tercer lugar, y finalizando aquí el jabón a Luis María, me parece increible que manteniendo unos principios tan coherentes e inamovibles en lo referente al cierre de Egin y Egunkaria, pueda estar a favor de la ley de partidos ¿En este caso no se cumple la premisa de que son las personas las que delinquen, y no los partidos? una gran contradicción que mancha ligeramente su actitud firmemente democrática.
El disidente 
porfin un nacionalista egpañol con algun criterio.
No será interes?? No sea que le pueda tocar a él algún día….O tal vez sea corporativismo?? Si no no se entiende que apoye prohibir partidos…. que en el sistema que tenemos montado son tan importantes o más que un medio de comunicación. Ante tamaña contradicción es deficil juzgar al señor Anson… una de cal y una de arena!
Hombre, no creo, él sabe de sobra que nunca se va a encontrar en la misma situación que Egunkaria o Egin, primero porque por su forma de pensar y por quién es, nunca va a ser sospechoso de colaborar con el «entorno» (que término más diabólico)
Si se ve en la misma situación sería por coletear con la extrema derecha española, pero tampoco, ya que en España ni amenzando de muerte, ni reclutando personas para matar ni guardando armas se te juzga, siempre que se haga en nombre de la una grande y libre.
Eso sí, la contradicción es para que se lo haga mirar.