Uno de los partidos que faltaba por analizar en Pasando de ésta línea era UPN, así que me dispongo yo a hacer un breve análisis sobre cómo afectaría el fin dle terrorismo a Unión del Pueblo Navarro (Nafarroako Herri Batasuna en euskera).
UPN gobierna la comunidad foral desde hace más de 20 años con un discurso político que ha ido progresando con el paso dle tiempo, poco a poco UPN ha ido desaciendose de su programa político habitual para convertirlo únicamente en lo que serían planteamientos ideológicos de ETA a la inversa. La presencia de ETA monopoliza el discurso de UPN, y de ese discurso se ha valido para legitimar su acoso público al euskera eliminando las suvenciones a las ikastolas, eliminando ayudas económicas a empresas navarras que se expandieran por la CAV, persecución de manifestaciones culturales vascas como el Olentzero y un largo etcétera, todo ello bajo la justificación de la deslegetimización del terrorismo.
Para UPN está claro, vasco=ETA, y esta estrategia la ha sabido utilizar magistralmente para enfrentar a la población navarra, mayoritariamente castellanoparlante contra la población vasca de Navarra, etiquetando a ésta última como «sospechosa» de terrorismo, ha conseguido también fagotizar la existencia del Partido Socialista en Navarra, cuya marca en principio era la del PSE y su lema «Nafarroa Euskadi da» (Navarra es Euskadi) para arrinconarlo a posiciones meramente españolistas bajo la marca PSN, convirtiéndolo en un partido sin espectro político en Navarra que ha pasado a ocupar la tercera fuerza en la comunidad, y todo ello por una utilización magistral de la estrategia «todo es ETA», nadie hoy en día se atreve a plantear las naturales características vascas de Navarra tras llevar UPN a la opinión pública su visión de «Los navarros, antes muertos que vascos» por miedo a manchar públicamente su imagen.
No cabe mencuinar por tanto cual sería la razón de la existencia de UPN en Navarra si ETA desapareciera de nuestars vidas, la evidencia cae por su propio peso.
El disidente 
sigues dando deasiado protagonismo a eta en la vida política.
si como sostienes la política d eupn se basa en marcar las diferencias de navarra respecto al pais vasco, no veo porque le tendría que afectar la desaparición de eta. después de todo, si ahora hay gran número de navarros que no quieren tener ninguna relación con el país vasco eso no tiene porque cambiar sin eta. lo contrario sería lo mismo que decir que, cuando desaparezca eta, no habrá ningún vasco que quiera marcar diferencias respecto al resto de españa
Si has entendido el post, sabrás que quien ocupa el 100% del programa político de UPN es ETA, así que me parece que no soy yo quien da demasiada importancia a ETa, son quienes sacan réditos electorales con ella.
Lo que hace UPN no es basarse en las diferencias con la CAV, lo que hace es utilizar a ETA como único argumento para denigrar la cultura vasca de Navarra, se han especializado en vivir políticamente por la existencia de ETA, y lo pueden pagar caro si esta desaparece.
no te voy a discutir tu opinión sobre upn porque es tu visión pero yo más bien veo que lo que ha hecho upn es explotar la insistencia de los nacionalistas vascos en anexionar navarra, incluirla en un gran país vasco, que han acabado cansando a los navarros que se consideran totalmente ajenos al país vasco, más o menos como ha ocurrido en valencia respecto a cataluña cuando estos empezaron a hablar de los paises catalanes con sentido político.
y dado que auqnue desaparezca eta los nacionalistas vascos van a seguir con el mismo discurso respecto a navarra, upn podrá mantener su base electoral
Sin duda podría seguir explotando la gallina de los huevos de oro, pero sus exageraciones sobre imposiciones y anexiones violentas y forzosas serían vacías, ya que quienes están a favor de la formación de una administración común siempre han dejado claro que sería respetando una mayoría que así lo quisiera, no sé hasta que punto podría la gente creerse la supuesta maldad de ese planteamiento político, no sé si triunfaría como está triunfando ahora mencionando la palabra ETA.
en mi opinión los votantes de upn no se guían por el mensaje de «que vienen los etarras» sino más bien por el cansancio que les produce oir constantemente a muchos políticos vascos referise a navarra como si fuera parte de su territorio cuando ellos prefieren una existencia separada, más o menos similar al papel que jugó el prc en cantabria para separarse de castilla y que hace que los partidos que defienden la vuelta a castilla carezcan de apoyo alguno
ese mismo argumento sería también aplicable a batasuna. sin violencia la situación sería muy similar a la que hay en cataluña o galicia, y batasuna dificilmente podría hacer calar el mensaje de la opresión española que nos encarcela, tortura y asesina por defender nuestras ideas.
como se ha visto en galicia con el bng y lo que parece que va a pasar en cataluña con erc, usar como linea política exclusiva «que malo es el estado» acaba costando votos cuando se confronta con la realidad.
Pues no sabía eso del PRC, a mí siempre me ha parecido que Cantabria tiene que ver más con Castilla que con ella sola, de hecho, si me dejaran dibujar Castilla y sus fronteras, ahí además de entrar Madrid, La Rioja y La Mancha, metería a Cantabria.
¿Por cierto, el hecho de que el PRC remarque sus diferencias con Castilla para existir como entidad propia no provoca que se les llame racistas, insolidarios y xenófobos como se les acusa a los que hacen lo propio en otros lugares?
el prc defiende la identidad propia de cantabria pero no ha retendido nunca disfrutar de derechos distintos a los que hay en el resto del estado, ni disfrutar de un trato distinto al que reciben otras ccaa como sí hacen otros partidos.
por otra parte el prc lo que usa, al igual que otros partidos regionalistas o nacionalistas es el gusto de la gente por sentirse diferente, especial frente a los demás y por eso creo que upn no perdería apoyos.
Yo he visto a gente decir que rechaza la tortura, pero luego defender la inocencia de los guardias que «presenciaron las autolesiones» de Unai Romano durante su interrogatorio, también he visto a todos los políticos rechazar la tortura delante de las cámaras y luego después votar en contra de proposiciones que permitan impedir la tortura y castigar al culpable.
También que en una democracia que lleva rodada más de 30 años aún no se haya erradicado esta lacra, con lo sencillo que es, es una prueba de la poca voluntad de los políticos por acabar con ella.